Por lo corta de nuestra existencia,
siempre buscamos trascender, es decir dejar una huella en este mundo en que vivimos. Algunos tienen hijos, perros, siembran arboles, componen canciones o pintan cuadros. Yo a los 15 años escribí mi primer poema. Y tu, si lees y recuerdas después de un tiempo lo que leíste aquí, una parte de mi estará en ti y cierto es que yo habré trascendido. Gracias por Visitarme.

17 de abril de 2017

Me critico a mi mismo



A veces me critico a mis mismo que son pocos los poemas de largo aliento que escribo, esos que linea tras linea, hoja tras hoja nos mantienen en su lectura, gratamente sumergidos.Y es cierto mis poemas son cortos, de no mas de un par de hojas, pero son estrofas, son versos que dibujan en otros, un instante aun mas corto que viví.
Una nube descarriada vagando sola lejos del cumulo o un valiente haz de luz que toca tierra una mañana  nublada, son instantes que me es imposible no dejar por escrito.
La luz de la luna bañando las sabanas y los pálidos dedos de mi esposa asomándose entre ellas, la tranquilidad que trasmite su rostro o el suave vaivén de su pecho.
 El amor que miro en los otros, ese brillo en los ojos, o una chica que muerde su labio mirando a su novio y este eliminando decidido los pocos centímetros que lo separan de ella.
La pasión sin mesura de un encuentro furtivo, la respiración jadeante, o la gota se sudor que va de su cuello, recorre el valle de sus pechos y muere en su ombligo.
A veces me avergüenzo de la brevedad de mis poemas, me apena que en no mas de un soneto, vierta lo que siento o sufro, lo que sueño o vivo.
Que escriba elegías cuando se va para siempre alguien que quiero o que escriba una oda cada vez que entristezco, que nunca grite o llore, porque para mi sentir se vuelva poesia.

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